Un nuevo estudio publicado por el Centro de Control y prevención de enfermedades de Estados Unidos (CDC) sobre la revisión sistemática y metaanálisis de la encefalitis transmitida por garrapatas en Europa desde el año 1980 al 2021 alerta sobre el riesgo de contraer encefalitis mediante el consumo de productos de leche cruda de animales afectados.
¿Pero cómo se explica este hecho? En la mayoría de los casos, las personas que adquieren encefalitis transmitida por garrapatas (TBE) a través de picaduras de garrapatas, pero ocasionalmente se puede contraer esta enfermedad mediante el consumo de productos de leche cruda de animales afectados.
En este estudio se analizaron casos de TBE transmitida por alimentos, principalmente de Europa central y oriental.
En total, el CDC ha tenido en cuenta 19 estudios que describen a 410 pacientes de toda Europa entre 1980 y 2021. Concretamente, los países que notificaron casos fueron Eslovaquia, República Checa, Polonia, Hungría, Estonia, Alemania, Croacia, Austria, Rusia y Eslovenia.
De 273 pacientes con datos sobre cuándo contrajeron la infección, en 243 casos fue de abril a agosto y 30 casos de septiembre a noviembre. Estos meses coinciden con la temporada de garrapatas en Europa.
En 232 pacientes la investigación puso de manifiesto el consumo de leche cruda de cabra o queso realizado con leche cruda; En 88 casos se había consumido leche cruda de oveja o queso en 88 casos, en 23 casos se había consumido leche de vaca no pasteurizada, constatando el consumo de una mezcla de productos lácteos no pasteurizados en siete casos.
La diferente carga viral de los productos lácteos explicaría que las personas puedan responder de forma diferente a su ingesta, así como el tener o no una pauta correcta de vacunación.