Los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP), internacionalmente nombrados POPs (Persistent Organic Pollutants, en inglés), son sustancias químicas que llegan a los humanos sobretodo a través del consumo de alimentos de origen animal (por su acumulación en la grasa).
Estas sustancias persisten en el medioambiente y se acumulan en los sistemas biológicos por lo que son detectables en casi todos los alimentos, aunque en algunos a niveles muy bajos. La toxicidad de los diferentes compuestos varía enormemente, pero los efectos por una exposición prolongada pueden variar desde efectos en el metabolismo o en el sistema reproductor hasta diferentes tipos de cánceres.
Los COP se caracterizan por:
- Tener una elevada permanencia en el medio ambiente al ser resistentes a la degradación. La mayoría de los COP son compuestos organoclorados (con una estructura molecular basada en el carbono y el cloro). El enlace carbono-cloro es difícil de romper, de manera que la presencia de cloro disminuye, también, la reactividad de otros enlaces en las moléculas orgánicas.
- Ser bioacumulables: se incorporan en los tejidos de los seres vivos (son solubles en grasas) pudiendo aumentar su concentración a través de la cadena trófica.
- Ser altamente tóxicos y provoar graves efectos sobre la salud humana y el medio ambiente: La química del cloro produce más de 11.000 compuestos organoclorados, la mayoría dañinos para las personas, los animales y el medio ambiente en general.
- Pueden trasportarse a larga distancia, pudiendo llegar a regiones en las que nunca se han producido o utilizado.
Entre los COP más importantes desde el punto de vista de la salud pública están las dioxinas y los PCBs, así como otras sustancias que contienen en su estructura química otros halógenos distintos al cloro (BFR, PFOS y PFOA, organoestánnicos). Según la evidencia actual, no todos los COP tienen potencial carcinogénico aunque la mayoría son tóxicos para el sistema endocrino.
Los más conocidos son:
- Dioxinas y PCBs
- PFAs
- BFR
- Parafinas cloradas
Las Dioxinas son los únicos que pueden tener un origen natural (erupciones volcánicas o incendios forestales), los COP son sustancias químicas de origen antropogénico, principalmente subproductos no intencionados de una serie de procesos químicos así como de casi todos los procesos de combustión. Muchos COP se utilizan o añaden a gran variedad de productos de consumo o comerciales para mejorar sus propiedades.
Actualmente está prohibida la producción de una gran variedad de COP por su persistencia en el medioambiente y su impacto en la salud pública. No obstante, todavía son liberados al medioambiente a través de fugas o por desechos mal controlados de productos que los contienen.
Regulación y prohibición de los COP
No se trata de un riesgo nuevo. De hecho, los efectos perjudiciales de los COP se conocen desde los años 60. Sin embargo, no fue hasta los 80 que se prohibió a nivel internacional la producción de la mayoría de COP, y aun en nuestros días se va ampliando la lista de sustancias incluidas en la prohibición.
Más información:
- Legislación sobre COP
- Página web de la Comisión Europea sobre COP
- Ministerio para la transformación ecológica y el reto demográfico